sábado, 22 de junio de 2013

MI PRIMER DIA EN PARIS

Salí de mi hostel con mi carga en la espalda rumbo al aeropuerto de Madrid, para esto tenia que caminar entre las calles de la ciudad a las 3:00 am para llegar a la estación de buses que van al aeropuerto, mientras iba caminando por las calles solitarias de vez en cuando aparecía algún grupo de jóvenes caminando dejándose llevar por el alcohol o alguna pareja que caminaban abrazados buscando algún lugar donde pasar el resto de la noche, luego caminar unos 25 minutos por la ciudad llegue justo para el bus del horario de 3:30 am.

Por lo que había averiguado el aeropuerto de Madrid es un megapuerto, sin equivocarme es la puerta de ingreso y salida de Europa. Así que el trafico aéreo es muy grande,  contaban con 3 terminales (hasta donde recuerdo) mi boleto indicaba que debería buscar el terminal Nº 1 del aeropuerto de Madrid. Por el horario de madrugada en la cual iba con el bus no me ayudaba a buscar por la ventana las señales o avisos para saber en que momento llegaba a un terminal, felizmente están en Madrid y era fácil comunicarme oralmente a mi alrededor.

Entrar al aeropuerto de Madrid es prácticamente como ingresar a un mercado mayorista, gente caminando en todas las direcciones, algunos con una mochila simple de viaje, otros con carritos llenos de maletines, gente sentado por los pasillos esperando los vuelos y filas enormes para validar, comprar y reservar vuelos. Lo primero que hice fue ubicar la linea área de bajo costo Ryanair que había comprado para mi siguiente destino y que estaba programado para las 7:00. París me esperaba. 

Luego de un casi un mes de andar por Europa, iba a volver a tomar un avión, ya que por Europa me moví con trenes, buses y autos. Así que el proceso de hacer check in, pasar controles, migraciones y ver mi maletín alejarse por la linea, todo ese proceso me parecido algo nuevo y extraño, pensar que algunas semanas atrás esto se había vuelto rutinario.

Faltando una hora para la salida de mi vuelo, ya estaba sentando frente a la puerta, puesto que el ultimo avión que había cogido, como muchos saben tuve una mala experiencia, así que tomaba todas las preocupaciones para que no me vuelva a ocurrir, estar como siempre una hora antes, revisar bien los horarios de mis boletos, el Nº de puerta de embarque y sobre todo la hora de vuelo y la hora de mi reloj. En ese proceso de espera tome un desayuno de una empanada de queso y un vaso de jugo de naranja.


El vuelo duro 2 horas y Francia nos recibía con frió y con fuertes ráfagas de viento. El avión había aterrizado en el Aeropuerto de Beauvais, este punto es muy popular por aquellas personas que buscan vuelos de bajo costo y quedan en las afueras de París por lo cual el aeropuerto pone a disposición buses para llevar a los pasajeros hasta el centro de París. 

Llegue aproximadamente a las 11:30 al centro de París, lo primero que tenia que hacer era buscar la estación de metro mas cercano, allí era fácil tener una lectura de la ciudad por medio de los planos que están siempre pegados en la pared. Me pase casi una hora tomando notas y revisando toda la información que podía obtener, a la vez trataba de ubicar como llegar a la dirección que me habían dado para llegar a la casa de Eli, mi concuñado. El trabajo fue algo difícil pero pude guiarme al final, otra vez estaba en una ciudad donde el español desapareció y ahora el frances era lo que predominaba. 



A medida que caminaba por la estación de trenes buscaba teléfonos públicos para poder llamar a Eli e indicarle que ya estaba yendo a su casa, pero estos teléfonos no aparecían, sin querer había llegado al paradero de trenes que estaba en la zona donde vivía Eli, pero no había podido contactarme con el porque en todo mi recorrido no había podido encontrar un bendito teléfono publico, creo que unas 5 personas mas descendieron conmigo en esa estación pero así como bajaron desaparecieron rápidamente por la puerta que daba a la calle, no me quedaba otra que salir al vecindario a buscar alguna tienda con algún teléfono.

Salí de la estación, las calles del vecindario eran solitarias, como si no viviera nadie allí, a lo lejos se escucha el paso de algún auto, mire hacia todos los costado para elegir que calle seguir y cuando apenas había dado unos cuantos pasos para cruzar la calle frente a mi se detiene un auto, como cortándome el paso y el que manejaba me hablo en francés y como no entendía nada, solo lo miraba tratando de entender algo, o pensando la manera como salir por un costado del carro si en caso estos eran asaltantes y se habían dado cuenta que era un turista por la mochila que me delataba la mochila, habrán pensado que estaba perdido y que era una presa fácil, pues lo era, estaba allí perdido. 

El chófer de auto seguía hablándome y solo atine a decir después de unos segundos:

- Sorry. I dont speak french - le dije, mientras me alejaba del auto.
- Are you Eli´s friend?

Apenas escuche “Eli” pare unos segundos y entonces me detuve para saber que mas me podían decir.

- Are you coming from Geneve?
- Yes – les respondí – Ya eran 2 coincidencias, ¿Como sabían mi nombre y como sabían que venia de Geneve?
- Come up – me dijo y me abrió la puerta

Dentro del auto habían 2 chicos mas, subí al auto con algo de desconfianza
- Y Eli? - dije
- En su casa.
- Y …- dentro de mi seguía la duda. Yo no había podido comunicarme con Eli, pero alli habían 4 jóvenes dándome a entender que lo conocían estaban y supuestamente habían estado esperándome en la estación …no entendía – ¿Como ustedes sabían que iba a llegar a esta hora a la estación y porque no vino Eli a recogerme?

El chofer respondio:

- El aun no sabe que has llegado, el te sigue esperando en casa, Eli nos contó que tu ibas a venir a Paris y que estas viajando por todos lados y como te vimos salir, con una mochila grande, pensamos que eras tu y por eso decidimos detener el auto.
- Ahhh –  me quede pensando
- Nosotros solo estábamos pasando por acá para irnos a otro lado y coincidimos en el mismo tiempo – espacio.

Fue así que estos jóvenes, me llevaron hasta la casa de Eli, donde almorzamos todos, me hice amigo de cada uno de ellos, no puedo mentir que me trataron muy bien, y trataban de preguntarme de todo ¿como era Perú?¿ como eran los peruanos? ¿que ciudades había visitado? ¿Cuantos días iba a quedarme en París? etc. El almuerzo fue muy bueno y amigable.


Ellos me invitaron a pasar toda la tarde en una iglesia, yo estaba cansando pero acepte ir con ellos, iba a aprovechar conocer la iglesia en Francia y como esta funcionan. Al llegar a su iglesia, los jovenes era buenos tocando algunos instrumentos y cantando himnos al estilo africano.

No sabia que la ceremonia a la que ellos iban terminaría a las 3:00 de la madrugada. Yo estaba muy cansado y con mucho sueño, pero trataba de soportar el cansancio ya que no podia ser descortes con la invitacion. Ya eran 2 días que no dormía bien y solo pude dormir una hora en el avión entre Madrid y París. Al llegar a casa de Eli de madrugada caí en el sion como una piedra, sabia que al día siguiente tenia que levantarme temprano porque el centro de París, la torre de metálica y el triangulo de vidrios estaban esperándome.






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